Cuidemos al
PLD
Por: Bartolo
Boyer y Water Encarnación
boyeregard@gmail.com
Artículo
Siempre es bueno traer a colación cuales son los compromisos morales que se
enmarcan en los lineamientos ideológicos de quienes una vez jurarán mantener intacta
su lealtad y decisión de permanecer vigilantes ante los posibles cambios de egocentrismos
e individualismos de líderes y miembros de una organización política.
Refresquemos
las memorias, con éste artículo del
médico, Water Encarnación, el cual pone de manifiesto los emblemas y objetivos
por lo cual fue creado el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), por el
profesor y escritor Juan Bosch Gaviño, como una forma de crear la esperanza de
un pueblo de hombre y mujeres ávido de recibir las igualdades del privilegio en
los más necesitados.
A continuación:
El Partido de la Liberación Dominicana es la obra
cumbre, magistral y exquisita del Profesor
Juan Bosch. La mente fecunda y prodigiosa de este gran hombre, maestro
ilustre de la política latinoamericana, concibió la idea de la existencia de un
instrumento político que hiciera posible
concluir la obra patriótica iniciada en el siglo pasado por los Trinitarios y
los Restauradores: establecer en esta media isla un país verdaderamente libre e
independiente.
Sin
claudicación alguna de principios, con métodos de trabajo sagrados y con una
línea organizativa excelentemente armónica y funcional; el PLD, con Juan Bosch,
a la cabeza, ha luchado incansablemente durante todos estos años por llegar a
la jefatura del Estado dominicano. Al fin, hemos llegado. Nos toca, ahora, poner
en práctica las ideas y objetivos del PLD y Juan Bosch, de erradicar, de una
vez y para siempre, la explotación del hombre, la corrupción, la pobreza, los
antivalores… “hasta lograr una sociedad donde el interés del pueblo prevalezca
sobre el interés de los grupos de personas
privilegiadas”.
Llegamos al
poder. Tenemos un gran reto, gran compromiso, una gran oportunidad de demostrar
lo que hemos predicado que somos: un partido al servicio del pueblo. De muchos
lugares, dentro y fuera del país, nos observan, nos vigilan. La mayoría quiere
que lo hagamos bien. Una ultra minoría desea que fracasemos. Sin embargo, la
inmensa mayoría del pueblo dominicano nos apoya, nos alienta y está por
colaborar por ayudar.
En esta lucha
difícil contra una cultura clientelista, corrupta y oportunista de la política
en la República Dominicana, la familia peledeísta debe mantenerse fuertemente
unida en el pensamiento y en la acción, en el respeto sagrado a los métodos de
trabajo y a la institucionalidad del partido. Solamente la Patria está por
encima de los intereses del PLD. Seamos justos, consecuentes y solidarios.
Seamos pacientes y cautelosos. Todos vamos a servir al pueblo. Sembremos la
semilla de un porvenir luminoso y esperanzador donde el ser humano nuestra
gente, se sienta digna y orgullosa de vivir en esta tierra dominicana.
Cuidemos
al PLD. Levantemos el país. Paz espiritual y paciencia para todos.
El futuro es nuestro.
Que Dios les bendiga a todos.
Fuente: periódico el Siglo. Pag. 11. Viernes 6 de diciembre de 1996.