miércoles, 4 de agosto de 2010

El tiempo tiene su magia


La señal del Arco iris


Reflexión


En el espejo una luz, y en el horizonte tres colores; el cancionero nadie lo toma, sus melodías pasaron de moda. Quisiera tener repuestas de lo que alcanzo ha ver; pero juraría, que alguien tiene algo que decir. En el encuentro del horizonte la selva, tiene palabras; ¿de donde vienes cargado de candor, enseñando tú radiante coloridos naturales del edén?, ¡Dicen que su presencia aleja la lluvia en la pradera!, óptico esplendor, en el reflejo una ilusión, roja, naranja, amarillo, verde, azul, violeta, y las calles de la alta estima cargada de felonía. Un emisario de las nubes, o un extranjero en la vida natural, cual sea su función elegante viste su mención. Ahora que llego la tarde, y no haces tu aparición, comentarios en boca joven se escuchan entre grillos, sonidos de moquitíllos que interrumpen el pensar, mi esperaza hoy a muerto, parece que el Arco iris, ya no aparece más. Guardo canciones viejas, para ya no esperar más, oigo cosas que se oyen en el vaivén del cantar. Anuncian nuevas propuestas en las cosas de mamá, pero ella nunca esta conforme siempre esta pidiendo. Se parece aún pueblo pidiendo cada ves más, nadie quiere ser su dueño Juanita, esta desespera. Yo sigo esperando el tiempo, algo tiene que cambiar; Salaz de mis ojos se humedecen de llorar, nadie tiene la respuesta cuando suelo preguntar, ¿y el Arco de los colores, que esperanza a mi me dan?, ¡se ha ocultado el roció, en la tierra donde nacen los clamores por promesas que se mueren sin llegar!.